La Iniciativa Belt and Road es un proyecto ambicioso que expande el alcance comercial e industrial de China al resto de Asia y el mundo. 126 países que albergan a unos 1.100 millones de personas se han adherido a la iniciativa como socios.

La construcción de toda esa nueva infraestructura y el impulso del desarrollo industrial, el comercio y el comercio internacional a lo largo de la Franja y la Ruta ha suscitado preocupaciones sobre la energía y el potencial de un enorme aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) si los combustibles fósiles fueran el recurso energético primario de la Franja y la Ruta. .
Los investigadores ven una alternativa de energía limpia, más rentable y sostenible. La energía solar podría servir como alternativa al carbón. Un equipo internacional dirigido por investigadores chinos descubrió que aprovechar la energía solar y mejorar la cooperación transfronteriza podría ayudar a los países que participan en la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI) a dar un salto hacia un futuro con bajas emisiones de carbono.

La energía solar es abundante en la región BRI y es una alternativa energética sostenible con respecto a mitigar el aumento de las emisiones de GEI y el calentamiento de las temperaturas medias globales. La Iniciativa Belt and Road es una oportunidad, ya que establece un marco para que sucedan las colaboraciones entre países, asociaciones e industrias. La energía solar también podría desencadenar un enorme potencial en este proceso.